El próximo viernes, 8 de noviembre de 2019, se celebra la XXV edición del Foro Barcelona de Seguridad Vial.

El objetivo de esta XXV edición del Foro 2019, «Seguridad Vial, los retos de las ciudades en el siglo XXI», es seguir trabajando por la seguridad vial, perseguir la visión cero víctimas de tráfico y plantear los retos de futuro en el siglo XXI, en materia de seguridad vial, y hacerlo compatible con la sostenibilidad de las ciudades.

El Foro Barcelona de Seguridad Vial se inauguró en 1994. ¡Este año celebra sus 25 años de historia!

A lo largo de estos años se han trabajado temáticas muy diversas relacionadas con la seguridad vial y la movilidad urbana, convirtiéndose en un Foro de reconocimiento como espacio de debate, diagnóstico y reflexión, que ha permitido a su vez, poner en marcha nuevas iniciativas.

Su finalidad ha contribuido al debate desde un espíritu constructivo, porque la seguridad vial y la movilidad es una responsabilidad de todos y todas, de la ciudadanía, entidades involucradas, sectores empresariales vinculados al transporte y de las administraciones.

La seguridad vial ha sido siempre una prioridad, así como reducir el índice de victimización por accidentes de tráfico. Las ciudades del presente y del futuro ponen al peatón en el centro de la seguridad vial y disuadirán del uso del vehículo privado, con un transporte público eficaz y sostenible, así como la indispensable gestión de nuevos tipos de movilidad.

Es necesaria una política municipal decidida y explícita hacia la reducción de las víctimas de accidentes de tráfico. Esta voluntad política debe concretarse en una serie de actuaciones preventivas, correctoras y técnicas aplicadas al espacio público, especialmente en los emplazamientos, situaciones y colectivos en los cuales la accidentalidad está más presente. Conviene continuar trabajando a favor del mantenimiento y mejora de la regulación y señalización del tráfico, por la pacificación del espacio público y por la vigilancia en el cumplimiento de las normas.

Sin embargo, una ciudad segura es la que cuenta con el compromiso de los ciudadanos en la reducción del número de víctimas. El instrumento más eficaz para la prevención de accidentes es el cambio de actitud de los usuarios de la vía pública, el rechazo frente a la siniestralidad y el convencimiento que la correcta convivencia se consigue a través del respeto a la integridad física propia y del resto de los ciudadanos.

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